Eclipse Solar en Géminis

Nos disponemos a experimentar un fenómeno que siempre genera mucha expectación por su espectacularidad así como también por la carga psicológica que tiene para el ser humano desde tiempos ancestrales, se trata de un eclipse solar que, en esta oportunidad, tendrá lugar en el grado 19 del curioso, versátil, intelectual y comunicativo signo de Géminis.

Este eclipse, que transcurrirá entre las 9:49 UTC y las 11:33 UTC., pertenece a la serie Saros 147 y será de tipo anular ya que ocurre cerca del apogeo lunar, permitiendo observar en algunos lugares un efecto conocido como anillo de diamante. En otros sitios, no obstante, sólo podremos apreciar el eclipse de forma parcial.

A nivel astrológico, los eclipses siempre van marcar un período de cambios, tanto a nivel personal como colectivo, en lo relativo a la energía del signo donde este tiene lugar. 

Ya sea que se trate  de eclipses solares o lunares, estaremos, ante la emergencia de contenido inconsciente que pide ser reconocido, aceptado e integrado a la luz de la consciencia.

En ambos, nuestra sombra, aquello que hemos reprimido u olvidado, es revelada, brindándonos una importante oportunidad de trabajo interno y, por tanto, de evolución, marcando  cambios importantes en la vida.

Cuando se trata de un eclipse de Luna, estos cambios afectarán sobre todo al lado femenino de la existencia, nuestro mundo interior, nuestra dimensión emocional, psíquica e instintiva, lo más íntimo, la familia, los afectos, lo relativo a los ancestros, a nuestras raíces, los recuerdos, así como  la casa y el hogar, puesto que la Luna tiene una fuerte connotación territorial, parental y tribal, de sentido de pertenencia a un mismo espacio vital y a un mismo clan, incidiendo, por tanto, a nivel colectivo, en los pueblos y naciones, ciudades y comunidades.

Por su parte, en un eclipse solar, es el principio masculino el que se oculta, cuando la Luna se interpone entre la Tierra y el astro rey. 

Entonces, lo consciente es eclipsado por lo inconsciente, la razón es ocultada por la intuición, que pasa a ser nuestra guía cuando la luz del Sol desaparece.

Las emociones y los instintos se imponen ante el raciocinio, por lo que tenderemos a actuar de forma más reactiva, irreflexiva y espontánea, siguiendo nuestros presentimientos y sensaciones.

Así mismo, esa ocultación solar, debilita la energía vital representada por el Sol, opaca el poder personal y pone en evidencia el lado más oscuro de nuestra dimensión egoica, la sombra, lo no reconocido de esa falsa entidad que ha sido ha formulada en base a los condicionamientos de nuestra  crianza, educación, cultura, ideología, medio ambiente, afectos, amistades, experiencias, etc., y que nos vive, por decirlo así, pues es la estructura por medio de la cual actuamos y nos expresamos en esta existencia y con la cual, erróneamente, nos identificamos.

Esta, tal como los rayos del Sol, que nos dificultan mirarlo directamente, no es más que un velo que oculta a ese verdadero Ser, eterno y trascendente, que somos.

En este sentido, hay que tener en cuenta que esa sombra, lejos de hacer referencia únicamente a a negatividades y defectos, que en el caso de Géminis pueden incluir volatilidad, dispersión, inconstancia, nerviosismo, superficialidad, murmuración, tramposería, entre otros, alberga también el tesoro oculto de nuestra creatividad, los talentos y capacidades que, por algún motivo, hemos reprimido.

Por tanto, un eclipse solar siempre será una excelente oportunidad para conectar con aspectos no reconocidos de nuestra creatividad, esa que ha permitido al ser humano sobrevivir y evolucionar. Esa que, muchas veces, suele emerger en los momentos más críticos de la existencia. 

Dicho esto, hay que considerar que actualmente estamos atravesando un período de eclipses que, por decirlo de alguna manera, nos propone una sinergia donde, el trabajo interno con nuestra sombra emocional, que venimos realizando gracias a la impronta energética del eclipse lunar del 26 mayo, nos facilitará el trabajo de reconocimiento e integración de esa sombra egoica que será revelada por el eclipse de Sol del 10 de junio.

Ese eclipse lunar en el signo de Sagitario, que tuvo lugar en torno al Nodo Sur de la Luna y que fue dispositado por el planeta Júpiter (por su regencia sobre el signo de Sagitario), el cual se encontraba recién comenzando su tránsito  por el místico e inspirado pero también confuso y fantasioso signo de Piscis, representó, entre otras cosas, una gran oportunidad para reconocer esas falsas creencias que albergamos en nuestro interior y que venimos arrastrando, fruto de condicionamientos atávicos, así como también esas vendas ideológicas que nos separan como humanidad, las cuales es preciso trascender para poder ser más empáticos y compasivos.

Ahora toca aunar, al trabajo interno en desarrollo bajo la impronta de ese reciente eclipse lunar, la propuesta de trabajo sobre nuestra dimensión  egoica a la que nos invita el próximo eclipse de Sol en el signo de Géminis, que afectará especialmente a los geminianos, sobre todo a aquellos que cumplan el  10 de junio o en fechas próximas a este, así como también a los sagitarianos, virguianos y piscianos que tengan su Sol en el grado 19 o cercano al mismo, con un orbe  máximo de 5 grados para la conjunción y oposición (que será el caso de Géminis y Sagitario respectivamente) y menor para el resto de aspectos. 

Valga decir que cualquier otro planeta de nuestra carta natal que tengamos dentro del orbe de aspecto con el eclipse en alguno de esos cuatro signos se verá fuertemente afectado.

Pero, sea como sea, se va a evidenciar un cambio resaltante en algún área de nuestra existencia, dependiendo de en que casa astrológica nos caiga el eclipse.

Y bien, toca ahora analizar qué puede representar este eclipse solar a nivel personal.

Un eclipse solar en el signo de Géminis, hace referencia, primero que nada, a una merma en la energía vital que ocupamos en nuestros procesos mentales y comunicativos, que puede producir fatiga o falta de energía para pensar, para hablar, para escribir, lo cual puede ser experimentado como una especie de pereza intelectual, no obstante, es simplemente que nuestra mente se encuentra, en cierta forma, desbordada por ese contenido inconsciente que está emergiendo, por tanto, es importante reconocer, aceptar e integrar sanamente la sombra  de la mente, su lado más oscuro y reprimido, su enorme potencial creador.

Géminis también tiene que ver con el cinetismo, el movimiento, la capacidad de ir de un lado a otro, por ello, puede que también nos sintamos con menos ganas de movernos, de desplazarnos, de hacer diligencias, de conducir, incluso de caminar. 

En este sentido, sería interesante comprender cuáles son las motivaciones internas más profundas que realmente hacen que queramos ponernos en movimiento, porqué preferimos ir a un lugar que a otro, cómo nos sentimos desplazándonos de una forma u otra, preguntarnos si estamos realmente cómodos cuando lo hacemos de una determinada manera. 

Dicho de otra forma, quizá descubramos que no nos sintamos realmente a gusto conduciendo un coche y preferiríamos ir en bicicleta o en metro o viceversa, o tal vez necesitemos cambiar de zapatos, o ir por un camino más agradable a la vista, que nos relaje y nos produzca disfrute en lugar de disconfort.

A todo lo anterior hay que agregar que Mercurio se encuentra retrógrado en el signo de Géminis, que es además uno de sus domicilios (el otro es el signo de Virgo), y que estará en conjunción al Sol y a la Luna, con sólo un grado de orbe, durante el eclipse,  por tanto, qué mejor momento para replantearnos la forma en que pensamos, nos comunicamos y nos movemos.

Este eclipse constituirá un reseteo a nivel mental, informativo, comunicacional y en lo relativo al movimiento y al transporte, tanto a nivel personal como colectivo, que conducirá a un cambio en estos ámbitos.

Ello puede dar lugar, aunado a la energía de Mercurio retrógrado a muchos acontecimientos.

Pueden llegar a suceder, por ejemplo, apagones informativos, averías en los servicios de telefonía o cualquier otra forma de comunicación, así como en los medios de transporte, así como problemas relativos a la vialidad.

Igualmente, podemos experimentar retrasos en el trasporte y las comunicaciones, correos que se pierden por el camino, comunicaciones que tardan en ser contestadas o que postergamos en contestar.

Es importante señalar que Géminis es primer signo donde la dualidad se hace patente, está representado por los hermanos Cástor y Pólux, conocidos como los Dioscuros, por ello tiene una connotación de hermandad, complicidad y de esa otra cara de nosotros mismos, de esa parte no reconocida que el hermano refleja, esa otra mitad de la que nos diferenciamos a pesar de nuestras semejanzas y del lazo que nos une. 

En un sentido más profundo, son esas dos mitades de uno mismo, nuestro lado de luz y oscuridad que, hermanados, unas veces se encompinchan y otras hacen pulso a ver quién domina la situación; son ese ángel y ese demonio que llevamos dentro, lo aceptado y lo reprimido, que es aquello que hemos negado, rechazado u olvidado, que pugna por salir a la consciencia y que alberga un enorme potencial para la luz, que sólo conseguiremos desarrollar si lo aceptamos, abrazamos, sanamos y canalizamos creativamente. 

Las relaciones con hermanos, ya sea consanguíneos o hermanos de vida, o con personas con quienes tengamos alguna relación de especial complicidad, así como con vecinos, pueden verse de alguna manera afectadas o alteradas tanto por la energía del eclipse geminiano como por Mercurio retrógrado en Géminis. Puede que recibamos noticias impactantes de su parte, que nos encontremos revisando viejos temas pendientes con ellos, o incluso el propio vínculo.

Las relaciones con amantes pueden verse igualmente afectadas a través de las ideas, la comunicación, la información o los desplazamientos. Podría ocurrir también que recibamos noticias sobre algún/a ex , que se reanude la comunicación con este/a o que incluso ocurra algún reencuentro.  

Por otra parte, este eclipse en conjunción a Mercurio retrógrado en Géminis puede marcar un tiempo propicio para cosas tales como encontrar papeles que habían sido extraviados, enterarnos de asuntos que permanecían ocultos o recuperar información que habíamos perdido.

La energía de Mercurio retrógrado en Géminis también es favorable para revisar y corregir textos, no obstante, hay que tener en cuenta que, con la energía del eclipse, la tendencia será a poner nuestra inspiración, intuición y sensibilidad en su faceta más profunda por encima del raciocinio, por tanto, se verá más favorecida la escritura orientada a textos creativos tales como novelas o artículos de corte artístico, psicológico o humanístico, que no la de tipo técnico o científico. 

Ello no quiere decir que no podamos realizarla si esa es nuestra tarea pero tendremos que ser precavidos para ceñirnos a lo meramente metodológico y no vernos tentados a teñir el texto de nuestras propias elucubraciones fundamentadas en esas percepciones internas que pugnan por salir al territorio de la mente, a no ser que estemos investigando algo y queramos abordarlo desde perspectivas o enfoques diferentes que quizá nos lleven a geniales descubrimientos, cosa que puede verse favorecida por el trígono que estarán formando el Sol, la Luna y Mercurio retrógrado en Géminis con Saturno en Acuario.

Sea como sea, es buen momento para tomar consciencia del talento que podamos poseer para elaborar ideas, para informar, comunicar,  escribir, y encontrar o redescubrir nuestro estilo particular de hacerlo, nuestra propia voz. Ello, nos puede permitir empoderarnos, abrirnos puertas en algún ámbito de nuestras vidas, dependiendo de la casa donde caiga el eclipse en nuestra carta natal, tal como lo indica el hecho de que el eclipse ocurra en torno al Nodo Norte, el cual representa una puerta que se abre hacia el futuro y que nos orienta hacia nuestra misión.

Así mismo, será posible redescubrir el encanto de la lectura y/o adentrarnos más profundo en ella. 

Hay que ser especialmente precavidos, no obstante, con qué tipo de cosas alimentamos nuestro intelecto en este período ya que, sea lo que sea, su impacto puede ser mayor en nosotros, y no se trata de tener una indigestión intelectual, sino de saborear a profundidad aquello que es realmente nutritivo para nosotros, aquello que puede hacernos tomar consciencia y evolucionar.

Es importante mencionar también la cuadratura que las luminarias junto a Mercurio retrógrado en Géminis estarán formando con Neptuno en Piscis.

Este aspecto tenso con el planeta de lo ilusorio puede traer como consecuencia la proliferación de engaños mediáticos, de fake news, de mentiras y entuertos, de paranoias colectivas, de conspiranoias (me refiero a aquellas que de verdad lo son, no a las genuinas percepciones e investigaciones serias y contrastadas de aquellas verdades ocultas que el sistema se empeña en negarnos).

Seguramente, Mercurio retrógrado y el eclipse nos ayudarán a descubrir tanto engaño pero la mentira y la confusión estarán allí, tendiendo su trampa, generando tensión y obstaculizando el camino a la verdad, que, todo sea dicho, en este mundo es tan relativa pues cada uno tiene la suya propia, mientras otros se empeñan en creer a ciegas lo que les cuentan los medios que suelen responder muchas veces a los intereses de ciertos poderes que quieren mantener el control. 

En este sentido, el eclipse solar geminiano es una excelente oportunidad para tomar consciencia de aquello que, lejos de ser un mero dicho, es toda una realidad, la información es poder.

Por ello, es fundamental aprender a discernir de qué fuentes bebemos y, sobre todo, aprender a cuestionar, a replantearnos la información, a aprender a pensar por nosotros mismos pero con criterio no al tun tún, de lo contrario puede que nos dejemos arrastrar por quimeras y fantasías que, lejos de acercarnos a la verdad trascendente y a una visión más fidedigna de la “realidad” (así, entre comillas, pues a final de cuentas todo en esta existencia es ilusorio), nos adormecen más. Aquí es donde la energía de Virgo nos sería de gran ayuda, pues es el signo vinculado a la verdad, al discernimiento, el que nos permite cribar las semillas, separar aquello que es verdadero de lo que no lo es.

La cuadratura a Neptuno también puede sacar a flote conflictos entre la mente racional y nuestra capacidad de soñar, imaginar o fantasear así como también entre nuestra dimensión mental y espiritual, el reto será encontrar la manera en que la nuestro raciocinio y nuestra inspiración y sensibilidad, así como nuestra razón y nuestra fe y conexión con lo divino o lo mágico, puedan actuar en sinergia de forma creativa y productiva. Habrá que ser precavidos, en todo caso, ante timadores que se aprovechan de las inquietudes espirituales de las personas para sacar provecho de ellas, pues la energía del eclipse puede representar un momento de mayor vulnerabilidad a éstos, así que hay que afinar el detector de sectas y falsos maestros.

En un sentido más material es muy factible que lleven a nosotros informaciones confusas, poco claras o tergiversadas, así como también sufrir extravíos de móviles, libros, carpetas o lentes, pero al estar Mercurio retrógrado es muy factible que consigamos recuperarlos. Así mismo, los robos y los timos pueden estar a la orden del día, así que habrá que ser más precavidos al respecto.

En otro orden de ideas, los eclipses solares siempre han guardado relación con el oscurecimiento, decaimiento o desaparición de figuras masculinas y, a nivel colectivo, de personalidades que ostentan algún tipo de poder o tienen un cierto brillo, como pueden ser mandatarios, famosos y personajes destacados de la sociedad, así como también con el eclipsamiento de figuras masculinas por parte de figuras femeninas.

En este caso, por tratarse de un eclipse solar acontecido en el signo de Géminis, podría tratarse, sobre todo, de personalidades del mundo intelectual, tal como escritores, conferencistas o comunicadores sociales.

Géminis es además un signo vinculado al comercio, por lo que este ámbito también puede verse afectado por la impronta del eclipse, que se dejará sentir de aquí al próximo eclipse de igual naturaleza, es decir, de aquí a unos seis meses cuando acontezca el próximo eclipse solar, (hay otro enfoque que afirma que su efecto se extiende hasta un año después y otro que propone que lo hace tantos años como horas dura el eclipse) aunque puede encontrar cierta resolución toda vez que Mercurio retrógrado llegue ocupar el punto oscuro (grado exacto donde ocurre el eclipse), que en este caso es el grado 19 de Géminis, lo cual ocurrirá sólo un día después.

En ese momento, quizá se repiensen algunas cosas, se recupere cierta información, se retomen conversaciones o se retorne a lugares, que acaben de desencadenar, canalicen o reorienten los acontecimientos propiciados por la energía del eclipse. 

Luego, entre el 1 y 2 julio, Mercurio, ya en movimiento directo, volverá a activar el eclipse, ofreciendo otra oportunidad de resolución para el mismo, desencadenando o poniendo en marcha ciertos acontecimientos de tipo mercurial, es decir, relativos a las ideas, la información, la comunicación, el movimiento, el transporte, el comercio, las relaciones de hermandad, etc., o a través de la intervención de personas mercuriales o que se comportan puntualmente de forma mercurial.

En cuanto a los lugares que pueden verse más afectados por el eclipse, cabría mencionar todos aquellos por los que pasará el cono de sombra, que en este caso incluirán al Polo Norte, a Groenlandia, Canadá, gran parte de la costa este de Estados Unidos, Europa y el norte de Asia, así como también aquellos donde el eclipse será angular, es decir, que caerá en conjunción a uno de los cuatro ángulos de la carta levantada para ese lugar en el momento del eclipse.

Otro de los acontecimientos que suelen activar los eclipses son los movimientos telúricos y, en ocasiones, otro tipo de fenómenos naturales, así como también cambios importantes y eventuales sucesos catastróficos ocasionados por la mano del hombre. 

En este caso, la cuadratura del eclipse a Neptuno en Piscis puede inclinar más a catástrofes vinculadas al mar, tales como maremotos, hundimientos de barcos, ahogamientos, rompimiento resaltantes de icebergs (dado el trígono del eclipse a Saturno en Acuario y el paso del cono de sombra por el polo Norte y Groenlandia). 

También podrían llegar a acontecer hechos nefastos propiciados por el fanatismo y, dado el trígono que el Sol, la Luna y Mercurio retrógrado en Géminis estarán formando durante el eclipse solar con Saturno en Acuario, aunado a la cuadratura de este con Urano en Tauro y la oposición entre Marte, situado en el grado 29 de Cáncer para el momento del eclipse y Plutón en Capricornio, es factible la ocurrencia de algún suceso dramático que puede recordarnos mucho a hechos ya acontecidos en el pasado y que seguramente será utilizados como cortina de humo para desviar la atención sobre otros temas, un suceso que podría resonar sobre manera con la imagen del Arcano XVI, la Torre. Lo otro que podría ocurrir es que se revele información oculta hasta ahora sobre ese hecho pasado del que os hablo. Esperemos que sea esto último y no lo anterior lo que ocurra que con el año que llevamos nada más nos faltaba.

También podría ocurrir algún crack financiero probablemente vinculado a los medios de comunicación de masas, a empresas de telefonía, al sector automotriz o al transporte en general. 

En todo caso, las noticias de impacto pueden estar a la orden del día.

Es recomendable siempre que hay un eclipse mantenerse bien hidratado, evitar los excesos en la comida y de cualquier cosa que pueda alterar nuestro metabolismo o nuestra sistema nervioso. 

Así mismo, es importante, estar lo más relajados posible, reducir el nivel de stress, descansar suficiente, meditar y aprovechar el momento para hacer introspección y trabajo interno, observar y aceptar lo que de ello emerja sin juzgar, intentando sanar y transmutar lo que sea preciso y dar un canal creativo a aquello que sea posible (evidentemente, esto último no es tarea de un día, sino que lo haremos en la medida en que la impronta energética del eclipse sea experimentada en nosotros a lo largo de su tiempo de influencia). 

Físicamente, hemos de cuidar especialmente, durante el tiempo que dure la impronta del eclipse, las zonas anatómicas regidas por Géminis y por el planeta Mercurio, tales como la tráquea, bronquios y pulmones, las clavículas, escápulas, omóplatos, los brazos (incluidos sus huesos, húmero, cúbito y radio), las manos y el sistema nervioso periférico.

También es recomendable no emprender proyectos o iniciativas importantes en torno al día del eclipse,  y, dado que está Mercurio retrógrado evitar firmar contratos o, si no queda más remedio, al menos prestar especial atención a la letra pequeña. De igual manera, estaría bien revisar con  detenimiento nuestros escritos y comunicaciones con el fin de evitar omitir aquello que es realmente importante.

Deseo pues que tengáis un eclipse revelador, que os muestre aquello que necesitáis trabajar y que asumáis la responsabilidad de hacerlo ya que ello redundará en el avance de vuestro proceso evolutivo.



Nathacha Oura
Astróloga y Taróloga


No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por comentar!