Luna Llena en Capricornio 2018


Ya se aproxima la Luna llena para mostrarnos el florecimiento o clímax del actual ciclo o lunación.

En esta ocasión contará con el signo de Capricornio como telón de fondo, un signo de naturaleza fría, práctica y racional, donde la Luna no se encuentra nada cómoda ya que corresponde a su lugar de exilio o destierro por ser el opuesto a su signo de domicilio, el maternal, fluctuante y emocional signo de Cáncer, desde donde el Sol se encuentra iluminándola.

Y para hacer más contundente tal acontecimiento, el astro lunar estará en compañía de Saturno, que además de ser dispositor de esta Luna por su regencia sobre el signo de Capricornio, se encuentra domiciliado y en conjunción a esta, concentrando así la energía de esta Luna en ese sector del cielo, en los dominios de la Cabra Marina, brillando concretamente desde el grado 6 del signo.

Este símbolo, la Cabra Marina, representa la cristalización de la materia que ha surgido del mundo de la sin forma, del mar infinito de lo insustancial.

Capricornio hace pues referencia al mundo material, a todo lo que tiene forma y, por tanto, está determinado por el paso del tiempo, representado por Saturno, el regente de este signo de Tierra, que nos enseña a crecer, a madurar y a envejecer y, con ello, nos confronta con la cruda realidad del ciclo de encarnaciones, recordándonos que todo en este mundo material está sometido a ciclos y al paso inexorable del tiempo.

Esta Luna llena en Capricornio viene, entre otras cosas, a hacernos tomar mayor conciencia del tiempo y de la materia, las estructuras, los límites, las leyes y normas, los horarios, la rutina, la monotonía, enfrentándonos con la realidad del día a día y conectándonos con la necesidad de organización, paciencia, constancia , seriedad y disciplina, así como con todas aquellas necesidades que podamos tener a nivel práctico, proponiéndonos trazar nuestras metas en función de estas.

A nivel emocional, la tendencia será a tener una actitud algo más fría o distante de lo normal, así que no será raro notar algo de antipatía o rechazo, pudiendo experimentar alguna situación en la que nos sentimos rechazados, criticados o juzgados, o bien en la que nosotros adoptemos tal actitud hacia otro/s.

Al ser la Luna significador de los temas familiares, de la casa, de hogar y de la madre y lo femenino en general, es muy probable que notemos esta sensación de frialdad, rechazo y/o juzgamiento en el mismo núcleo familiar, o bien, que la vivenciemos a través de alguna experiencia con la madre o alguna otra figura femenina.

En todo caso, los afectos pueden estar pasando una especie de prueba y el karma familiar puede estarse notando especialmente en este período. Es momento de concretar asuntos relacionados con la casa, el hogar o la familia y cumplir a rajatabla con las responsabilidades que correspondan y resolver asuntos de tipo práctico, algunos podrían sentir, incluso, que la familia les exige más de lo acostumbrado, o bien que les encargan tareas pesadas, difíciles o tediosas.

La conjunción Luna/Saturno en Capricornio también podría hacernos estar más exigentes a nivel emocional, como si no tuviéramos suficiente, independientemente del mucho o poco afecto que nos expresen los demás, y lo más seguro es que deseemos que nos lo demuestren con hechos, de forma práctica y tangible. Será muy importante, sobre todo, el sentir que somos respetados y tomados en serio. Puede también que sintamos que los demás nos demandan precisamente lo mismo. 

Sea como sea, es un tiempo en el cual se nos pide madurez emocional, sobriedad, teniendo cuidado en no caer en esa frialdad saturnina y volvernos un témpano de hielo si sentimos que nuestras demandas no son respondidas como esperamos. 

Saturno nos hace medir todo en cuanto a expectativas, nos lleva a trazarnos metas, objetivos, a plantearnos desafíos, a aspirar obtener cosas muy concretas y, si no lo logramos, entonces nos sumerge en un sentimiento de frustración y, estando en su propio signo de regencia, Capricornio, esta puede experimentarse de forma especialmente amarga, hasta el punto de hacernos sentir bloqueados, cansados, incluso desganados, sin embargo, este signo nos invita a persistir, a no rendirnos, a hacer como las cabras o los montañistas que, de forma lenta pero segura, sabiendo bien donde pisar, van ascendiendo hasta llegar a la cima.


Y así, con esta conjunción Luna/Saturno en Capricornio, nos encontraremos con desafíos internos, con emociones congeladas, con vertientes emocionales de las que sentiremos miedo a caer, con la promesa de una cima que nos hemos propuesto alcanzar. Y al final, pase lo que pase, habremos ganado madurez y experiencia.

Entre las muchas cosas que nos enseña Saturno en Capricornio podríamos resaltar el hacer respetar nuestros límites, así como también respetar los límites de los demás, en este caso, los límites en lo relativo a lo emocional, la intimidad, lo femenino, los temas familiares, de la casa, la comida, etc.

No es buen momento, por ejemplo, para darse un atracón, con esta Luna llena en Capricornio es mejor comer de forma más bien comedida, comer lo justo, puede que algunos, incluso, se noten algo inapetentes.

Saturno también hace referencia a la austeridad, así que estando conjunto a la Luna llena en Capricornio, puede que experimentemos algún tipo de carencia o restricciones en cuanto a la casa o el hogar, ya sea en lo relativo a la comida o alguna otra necesidad.

Es importante resaltar, además, que Saturno actualmente se encuentra retrógrado, llevándonos a revisar nuestras metas y responsabilidades, a reestructurarnos y reorganizarnos; puede que nos haga sentir que todo se ralentiza y que no es el momento más apropiado para construir, no obstante, es más bien un tiempo de reconstrucción, así como de replanteo de nuestras metas para hacerlas más firmes y concretas. Saturno retrógrado nos pide interiorizar su energía, ayudándonos a darnos cuenta de donde están los errores y los bloqueos que nos impiden crecer y nos llama a trabajar en la solución a través del desarrollo de sus virtudes y cualidades, tales como la disciplina, el trabajo, el orden, la paciencia, etc.

Estando en conjunción a esta Luna llena, es posible, por ejemplo, que nos replanteemos alguna meta en lo relativo a la vivienda, la familia, la nutrición, los afectos, la intimidad o las emociones, que ambicionemos una mejora estructural en alguno de estos ámbitos, ello puede deberse a que no nos sentimos satisfechos con como se desarrollan, que nos reconcoma el sentimiento de que podría ser mejor. 

Puede también que se nos exija o exijamos el cumplimiento de responsabilidades, sobre todo de tipo familiar o de negocios, que habían sido aplazadas o que se habían visto interrumpidas, o por el contrario, que experimentemos retrasos en el cumplimiento de algunas de estas. También es probable que vuelvan viejos recuerdos, cosas que hace mucho tiempo habían quedado en el pasado y que quizá debamos recordar para integrar mejor la lección que nos dejaron. Por otra parte, es buen momento para replantear y reorganizar nuestra rutina, así como revisar nuestro calendario, para reajustar metas y objetivos.

Saturno siempre nos propone, entre otras cosas, crecer, madurar, concretar y, en este caso, lo hará en función de aquellos temas relativos al simbolismo lunar, instándonos a hacerlo de forma sumamente práctica, organizada y realista, como corresponde al signo de Capricornio.

Por si fuera poco, esta conjunción Luna/Saturno en Capricornio se encontrará en trígono con Urano en Tauro, que puede, entre otras cosas, llevarnos experimentar cambios radicales y/o repentinos en cuanto al tema económico, puede que a algunos les llegue un dinero inesperado, otros, en cambio, algún gasto que no estaba incluido en su presupuesto y que afecte la economía doméstica. Esta ganancia o gasto repentino también puede estar vinculada a algún negocio propio. También es posible, por ejemplo, que algún amigo nos eche una mano con dinero o algún recurso que necesitemos para superar algún bache familiar o en nuestro negocio, o para ayudarnos a concretar alguna meta.

Podría ser, así mismo, que aprovechásemos la energía de Marte retrógrado en Acuario, cuyo dispositor es, precisamente, ese Urano en Tauro y reiniciar algún emprendimiento que haya quedado en standby o inconcluso, podría ser algo relacionado con las redes o con grupos, o alguna iniciativa con antiguos amigos, con el objetivo de generar dinero y poder paliar dificultades del hogar o cumplir metas, ya sea familiares y/o de negocio o alguna otra meta realista que ambicionemos en nuestro fuero interno.

En todo caso, no es buen momento para llevar a cabo nuevas iniciativas hasta que Marte retome su movimiento directo, sino más bien, como he dicho antes, reanudar aquellas que quedaron pendientes, en ambos casos es muy aconsejable revisarlas antes de pasar a la acción. Sea lo que sea, actuemos con la debida prudencia, realismo y organización, asegurándonos de que todo está en orden, y que el nivel de riesgo es asumible, de lo contrario, en lugar de construir, nos veremos sometidos a desatinos y/o a más restricciones y exigencias que quizá no nos compensen.

También es importante resaltar la T cuadrada que estará siendo conformada por el Sol en Cáncer y la Luna y Saturno en Capricornio con el Centauro Quirón, conocido como el Sanador Herido, que se encuentra recorriendo a su ritmo los primeros grados del signo de Aries y que vendrá a ser el ápice o punto focal de esta T cuadrada que nos invitará a trabajar una herida relacionada con alguno o varias de estos puntos: La personalidad, la voluntad, el liderazgo, el ímpetu, la iniciativa, los emprendimientos, la violencia, la guerra, la lucha o, bien, con lo masculino.

La casa por donde esté transitando en nuestra carta natal, así como cualquier planeta que pueda estar aspectando en la misma nos aclararán en que ámbito de la vida y a través de que experiencias se vivenciará esta herida y/o cumpliremos la función de sanador herido.

Que esta Luna llena en Capricornio nos ayude a crecer y a madurar, a ser más prácticos, realistas y objetivos y a cocrear con los pies en la tierra los recursos que necesitemos y usar creativamente aquellos que ya poseemos para ayudarnos cumplir nuestras metas.


Nathacha Oura
Astróloga y Taróloga

Segunda Luna Llena en Sagitario y Solsticio de Verano 2016


La próxima Luna llena tendrá lugar en el mismo signo que la anterior, el expansivo y aventurero signo de Sagitario, en esta oportunidad brillará a finales del mismo, concretamente en el grado 29, el día 20 de Junio a las 11:02 horas (UT).

En este grado del signo de Sagitario se encuentra la estrella Sinistra, perteneciente a la constelación de Ophiucco y de la cual se dice que cuando es activada por el tránsito de la Luna da tendencia a la voluptuosidad, el libertinaje, la infamia y el escándalo, así que este plenilunio puede deparar una especial intensidad. Recordemos, en este sentido, que Sagitario exhibe una naturaleza dual, por un lado filosófica, visionaria, en constante búsqueda de ese sentido superior de la existencia y, por otro lado, salvaje, animal, afianzada es los sentidos, que disfruta de la aventura y los placeres sensoriales y tiene como premisa la libertad.

Sea como sea, no faltará la intensidad en esta Luna llena, máxime cuando el Sol que la ilumina desde el grado diametralmente opuesto en el signo de Géminis, se encuentra acompañado de Venus , quien ya se habrá adentrado en el primer decanato del signo de Cáncer, una Venus que demanda afecto, calidez y la complicidad de ese Sol geminiano que la acompaña y que, con su cariño y acogedora presencia, preparará el ambiente ideal para que ese Sol geminiano comparta con ella sus ideas, movimientos y, tal vez, hasta algún viaje o visita, a lo cual la Luna en Sagitario se prestará receptiva con su habitual espíritu aventurero, dispuesta a lo que surja con ansias de explorar lo desconocido.


El todo es que podamos sentir que expandimos nuestro mundo emocional, nuestros conocimientos superiores, nuestra sabiduría, el conocimiento sobre algún pueblo o cultura particular, o nuestro sentido de pertenencia a algún lugar tanto como sea posible, y cualquier propuesta que nos invite a ello por parte de otros y de nuestra propia inquietud vital, seguramente será bien recibida, ya que estimulará nuestro intelecto y llenará nuestra alma de un sentido más pleno, pero atención, la Luna en Sagitario nunca está satisfecha, con ella el alma siempre deseará expandirse más y más, tanto como pueda. 


Para algunas personas esta oposición puede representar, incluso, el plantearse ampliar la familia, hacer brotar una nueva rama del árbol que permita expandir la promesa del linaje familiar, esa promesa de aportar al mundo la sabiduría del linaje y de intentar sanar sus heridas, que pueden encontrarse algo removidas puesto que la Luna estará en cuadratura con Quirón en Piscis, que nos habla de heridas de profundamente arraidas en la psique y en el inconsciente colectivo, aquellas relacionadas con el sufrimiento de las masas, con situaciones de abandono, profundo dolor y sacrificio, situaciones de pobreza miseria, aislamiento y/o reclusión y la herida ancestral de la separación de la fuente.

La Luna llena sagitariana se encontrará, además, formado un trígono con Urano en Aries, lo cual la impulsará a experimentar lo novedoso y afirmará su natural necesidad de libertad que, en este caso, propiciará y/o se verá propiciada por algún cambio o giro inesperado en alguna faceta de nuestras vidas.

Por si fuera poco, contaremos con un sextil entre la Luna llena y Lilith que se encuentra a principios de Escorpio, que con su poderoso psiquismo y su profunda sabiduría de la sombra y del poder que reside en la magia, potenciará las cualidades intuitivas y visionarias de esta Luna, que se sentirá tentada a adentrarse en el abismo insondable de sabiduría lilithiana, e indagar en su tántrico poder. Es un buen aspecto para transmitir la Sabiduría oculta, para investigar sobre temas oscuros, misteriosos, para celebrar la sabia conexión entre la faceta luminosa de la Diosa y su naturaleza oscura, transformadora y guardiana de los misterios.

Otro sextil se unirá a esta mágica conexión, ya que la Luna también se encontrará aspectando al asteroide Juno, el cual se encuentra retrógrado a finales del signo de Libra y en conjunción a Lilith, potenciando el deseo del reencuentro y reconexión resultante de ese compromiso que establece la pareja de reconocerse el uno a través del otro y que con Lilith se profundiza, mostrándonos mutuamente a través de la sombra aquellas facetas que nos cuesta reconocer y permitiéndonos experimentar una unión poderosamente tántrica y transformadora, potenciando además el deseo sexual, satisfaciendo así la necesidad de la Luna sagitariana de aventurarse al disfrute de los sentidos, dando rienda suelta a nuestra naturaleza salvaje.


Y a todo esto se suma un intenso, emotivo y fogoso trígono entre la conjunción Lilith/Juno y la conjunción Sol/Venus que predispondrá a la intimidad y la complicidad como parte de esa profunda reconexión.

Este plenilunio también contará con la tensa dinámica de una cruz cósmica conformada por la oposición entre Mercurio en Géminis y Saturno retrógrado en Sagitario, ambos en cuadratura a la oposición entre Júpiter en Virgo y Neptuno en Piscis.

La primera oposición nos planteará el reto de reconciliar las ideas y la comunicación con los paradigmas y las estructuras filosóficas, políticas, religiosas y de enseñanza que aún siguen siendo caducas y se empeñan en repetir errores del pasado, en este sentido, el aire fresco que podamos aportar servirá o debería servir para fomentar el debate y llevar a la reflexión y reestructuración necesaria de esos idearios que no satisfacen las altas y nobles aspiraciones del espíritu humano, promoviendo así un mundo más justo y un desarrollo cultural más sostenible y consecuente, al que, por supuesto tendremos que contribuir asumiendo la responsabilidad que nos corresponde a cada uno en ello.

No obstante, esta oposición también nos advierte de una marcada tendencia a que nuestras opiniones sean censuradas y/o juzgadas por personas de ideología conservadora y/o excesivamente anclados en el pasado. 

Más aún, la libertad de expresión está pasando por un momento de especial vulnerabilidad en muchos lugares y esto ya transciende ideologías, es más bien motivado a esa recalcitrante ambición de conservar el poder que tienen las élites políticas, no olvidemos que Plutón es actualmente dispositor de Saturno, por su presencia en el signo de Capricornio.

En lo que respecta a la oposición Júpiter en Virgo conjunta al Nodo Norte y Neptuno retrógrado en Piscis conjunto al Nodo Sur, esta nos plantea el reto de reconciliar los sueños y utopías insostenibles con verdaderos ideales y una filosofía de vida práctica y funcional que rescate la esencia de esos sueños sin perderse en ellos y permita concretar lo posible a través de proyectos concretos. 

Las utopías no dan de comer, han de servir para motivarnos a ir más allá, pero cualquier propuesta o proyecto ha de ser transitado con los pies bien puestos sobre la tierra y esto vale tanto para lo político, religioso y cultural, como para nuestra propia filosofía de vida. No obstante, la introspección espiritual será necesaria para poder revelar desde lo sutil e intangible y desde la fe y el amor incondicional la inspiración y el espíritu necesario para infundir de aliento esos proyectos y sueños posibles. 

También nos invitará a encontrar lo grande en lo pequeño, a Dios en la cosas sencillas, al amor inconmensurable de los divino en los ideales virtuosos de quien, en lugar de rezar o además de ello, actúa y contribuye a resolver las dificultades, en este caso, las que plantea la cuadratura de Saturno, y las resolverá a través de su propia misión, dándole un sentido particular a su existencia.

La cuadratura con Mercurio, por su parte, dinamizará nuestras ideas en la búsqueda de ese propósito y de ese ideal y filosofía de vida más justa, consecuente y sostenible. Es importante reajustar y perfeccionar nuestro ideario, en búsqueda de lo virtuoso y verdadero, para afinarnos en el encuentro de nuestra particular misión de vida dentro del plan evolutivo de este planeta que es nuestro hogar.


Y justo a las 22:34 UT del día 20 de Junio tendrá lugar el Solsticio de Verano, con la entrada del Sol en el signo de Cáncer.



La Luna para entonces ya se encontrará en Capricornio, llamándonos a frenar un poco tanta efusividad y expansión, adoptando un talante más comedido para poner un poco de orden en nuestro mundo interior, así como organizar temas familiares y del hogar y dedicar también especial atención y concentración a lo profesional, a nuestros negocios y metas.

El Solsticio de Verano, nos abre su puerta con la conjunción entre el Sol y Venus en Cáncer, lo cual anuncia celebraciones y momentos de esparcimiento con la pareja en un entorno familiar, siendo un momento especialmente favorable también para visitar museos o disfrutar del teatro o algún festival local. 

En este período de comienzo del verano necesitaremos sentir que contamos con el apoyo emocional de la pareja, su cariño y calidez puede ser la mejor medicina para aliviar la tensión y el stress de las exigencias cotidianas, así como el amor de la familia que también nos ayudará a mantener el entusiasmo ante cualquier adversidad. 

Tensiones no faltarán con la cruz cósmica mencionada más arriba, así que valoraremos más que nunca el cariño, la dulzura y apoyo de nuestros seres queridos, ellos también precisarán que les hagamos notar que cuentan con nosotros, que les animemos si hace falta y compartamos actividades con ellos. 

Es un buen momento también para embellecer la casa, quizá pintar o adornar ese rincón que deseamos resaltar. Sentirnos rodeados de belleza y crear una atmósfera de paz en el espacio que habitamos es importante con la conjunción Sol/Venus en Cáncer.

También se presta para compartir en familia en torno al fuego y así celebrar esta simbólica fiesta, Litha, en la que el Dios Sol ilumina a la Diosa Madre Tierra con mayor intensidad y durante mayor tiempo, obsequiándonos el día más largo del año, vibrante de Luz, con la fértil impronta que irradia desde el signo de Cáncer.

Es un día especial para hacer peticiones de protección, fertilidad y dicha, tanto personal como para nuestros seres queridos, familiares, pareja, pedir paz y luz interior, para nuestro hogar, así como para ese gran hogar que es nuestra Madre Tierra, permitiendo que la luz del Sol interior queme todos los miedos, bloqueos y programaciones limitantes y brille con total intensidad irradiando de dentro hacia fuera toda nuestra belleza, paz y armonía, sintiéndonos amorosamente protegidos por esa fuerza vital que nutre nuestros corazones.

La generosidad también se encontrará a flor de piel y se hará evidente la necesidad de compartir, ya sea el afecto, la compañía, el alimento, el hogar, colmando así el principal impulso del Sol en Cáncer que es cuidar, abrazar, acoger y nutrir.

Que podamos pues disfrutar ese deleite que proporciona al alma el sentirse rodeado de amor, bien acogido, celebrando la vida en buena compañía, esa que nos hace sentir en familia, parte de un clan en el que el amor brilla dulcemente en ese afecto y cuidado mutuo que nos prodigamos. Y que el divino fuego solar nos fortalezca interiormente para desterrar con su luz nuestras inseguridades y preocupaciones, que pueden afrontarse sabiamente con ese poder que el linaje familiar nos ha transmitido, esa es la perla escondida que el signo de Cáncer nos obsequia. 

No hay ningún obstáculo o situación para la que no estemos capacitados, pues la impronta del linaje familiar atesora las claves para salir victoriosos. Es un buen momento para arrojar luz sobre ello, para hacer mayor conciencia sobre la importancia de nuestras raíces y honrar nuestro legado. La mejor forma de abordarlo será el sabio y comprensivo amor.

Feliz y expansiva Luna llena y un amoroso y cálido fuego de Litha para todos.


Nathacha Oura
Astróloga y Taróloga

La Templanza


No estamos solos en el camino de la vida, formamos parte de una familia cósmica, de una red de almas... Esos amigos que nos asisten en los momentos de mayor necesidad, esos aparentes desconocidos que se cruzan en nuestro camino para obsequiarnos su presencia luminosa y alguna pista más, alguna guía, palabra, abrazo, nos recuerdan que la humanidad es una gran familia de seres que empiezan a abrir sus alas y a desplegar su potencial sanador... Toda vez que aprendemos a armonizar nuestras energías, estamos mejor dispuestos para ayudar a otros... Ello requiere de templanza.

La templanza es ese sabio equilibrio que se manifiesta en salud, armonía, paz, serenidad, presencia.


Ella desarrolla la paciencia, a través de la observancia y reajuste de nuestro plano emocional, permitiéndonos afrontar la vida con estoicismo y sabiduría, desdramatizando y aprendiendo a observarla desde una perspectiva más elevada que nos permita superar los obstáculos con mayor facilidad, haciendo fluir el agua, que representa nuestras emociones, con sencillez y naturalidad, manejándolas de forma impecable, para no desbordarlas, no en la actitud de quien se reprime a sí mismo, sino en la responsabilidad de hacerse cargo de ellas, de ser consciente de lo que nos producen, experimentarlas y vaciarlas para irlas filtrando, depurando y sutilizando...

Templanza es también saber discernir lo trascendente de lo intrascendente, lo esencial de lo superfluo, es austeridad interior, que nos permite transitar más serenos por la vida.

Representa el equilibrio entre lo material y lo espiritual, entre el tiempo propio y el compartido, entre la diversión y el trabajo, la actividad y el descanso, es la vida experimentada a través del gozo de la armonía.


Nathacha Oura
Astróloga y Taróloga

El Diablo




El Diablo representa el arquetipo de la Sombra y aunque en el imaginario colectivo esta figura ha sido teñida de maldad, en realidad no es más que una representación de aquellas partes de nosotros mismos que normalmente nos negamos a reconocer...


Su imagen nos remite al semidiós Pan de la mitología griega, al mítico Fauno de los romanos o al Cernunnos, de la cultura celta, relacionados con el instinto y la potencia sexual, la naturaleza salvaje, los bosques y la fertilidad.



Es por ello una carta de gran poder creativo, ese poder interno que nace de lo más profundo de nosotros mismos y que puede ser utilizado de muchas formas, en ocasiones de forma creativa, para engendrar vida, experimentar el placer del disfrute de los sentidos, la pasión de estar vivo y para conectar de forma profunda consigo mismo, con los demás y con el entorno, pero también puede ser experimentado como una energía destructora, dolorosa, pues nos hace conscientes de nuestra obscuridad, de aquello que nos cuesta aceptar, de nuestros instintos más pueriles, nuestros miedos, apegos, bajas pasiones, tales como celos, odio, envidia, resentimiento, que muchas veces nos encadenan al dolor y al sufrimiento...

El diablo con su antorcha ilumina esa obscuridad y nos confronta con ella, ofreciéndonos la oportunidad de hacerla consciente e integrarla de forma creativa en nuestras vidas. Nos recuerda también el enorme poder que tenemos en nuestro interior y que es posible utilizar para transformarnos a nosotros mismos y al mundo en que vivimos... Siempre podemos llevar una luz a la obscuridad de otros, pero sólo en la medida en que somos conscientes de nuestra propia obscuridad.


Entonces, nuestra antorcha se enciende y lleva luz allí donde se necesita.

En ocasiones es otro el que nos trae esa luz y nos muestra nuestras cadenas. A veces nos gusta estar encadenados, a veces no, todo depende si vivimos el diablo como una tortura o como una forma de reconocerse a través de un aprendizaje mutuo de nuestras zonas más oscuras. El otro nos sirve de espejo de nuestra propia obscuridad, de aquello que hemos de reconocer e integrar en nosotros mismos, que no tiene porqué ser necesariamente algo negativo, es simplemente alguna faceta propia que no acabamos de aceptar, ya sea por prejuicios, traumas o programaciones psicológicas.

Comprendemos que hemos sido unidos para jugar a descubrirnos desde la sombra, que podemos elegir aceptarla y sanarla o hacernos daño negándola; si elegimos sanar, daremos un salto cuántico a una carta muy especial, los enamorados...

Habremos hecho luz de las tinieblas y habremos rescatado lo más hermoso de ellas, el reconocimiento íntegro del personaje que encarnamos en este juego creativo (llámalo maya, lila, vida, existencia condicionada, samsara) que el Ser diseñó para conocerse a sí mismo. 


Nathacha Oura
Astróloga y Taróloga