Se abre paso una nueva Lunación, con un novilunio eléctrico y errático, que puede llegar a sorprendernos, ya que esta Luna nueva tiene lugar en el cambiante e inquieto signo de Acuario, concretamente, en el grado 23.
Si bien la Luna nueva es un período de introspección, profundización, descanso y meditación, cuando esta tiene lugar en el signo de Acuario podría decirse que es la calma que precede a la tormenta.
Algo muy vibrante y disruptivo se está fraguando. Están pasando muchas cosas aunque aún no puedan verse sino sólo presentirse.
La intuición y el psiquismo en general estarán poderosamente potenciados y podemos sentirnos profundamente inspirados lo cual puede estimular nuestra creatividad y dar alas a nuestra imaginación.
Hay muchos movimientos en la sombra. Y en nuestro interior subyace cierta agitación que puede que no sepamos muy bien a qué se debe, ya que estos movimientos vertiginosos están operando, de momento, a nivel inconsciente, prometiendo un ciclo lleno de altibajos emocionales y en el que se hará patente la necesidad de novedad y libertad.
Una vez la Luna empiece a crecer en luz, iremos viendo como los cambios emergen, aún durante el tránsito de la Luna por otros signos, durante este ciclo, ya que la impronta del novilunio acuariano se hará sentir, como lo haría una semilla cuya característica esencial es el cambio, en cada etapa del desarrollo de la planta, así como también se hará notar, a lo largo del ciclo, la impronta energética de la Luna llena, que tendrá lugar en el laborioso, detallista y perfeccionista signo de Virgo.
Y es que la semilla ya contiene la flor y los frutos en potencia y en estos sigue persistiendo su germen, como potencialidad ya desarrollada.
En este caso, la semilla de renovación, la rebeldía, la agitación y la creatividad acuariana florecerá a través de la minuciosidad, la pulcritud, el sentido de utilidad, la precaución y la sobreprotección virguianas.
Esto puede expresarse, por ejemplo, como una necesidad de tener todo bajo control ante los cambios que se vayan suscitando durante este ciclo. Tal como lo haría un malabarista, cuya pericia, precisión y minuciosa concentración le permiten atajar sus mazas en el aire, intentaremos manejar todas las situaciones por erráticas que sean con la mayor seguridad posible, precavidos ante lo inesperado, atentos al detalle ante cualquier cambio o imprevisto que pueda acontecer.
Antes bien, podemos observar con atención y analizar, qué utilidad tienen todos los cambios que ocurren, o bien, que utilidad podemos llegar a darles. En todo caso, aunque no podamos evitar ciertos cambios, sí que podemos gestionarlos con sentido común y llegar a poner orden en el caos, al mejor estilo virguiano.
Por otra parte, es muy posible que sintamos ganas de introducir cambios en nuestra rutina. O que nos veamos en la necesidad de hacer ciertos cambios radicales respecto a nuestra dieta, nuestros hábitos de higiene o ejercicio.
Los cambios también pueden hacerse notar especialmente en el ámbito laboral, esto puede manifestarse como un aumento repentino en el volumen de trabajo, proyectos inesperados, mudanzas o reformas en nuestro espacio de trabajo, sucesos resaltantes relacionados con los equipos informáticos o el trabajo en redes, despidos o contrataciones inesperadas, protestas, agitación, así como cualquier tipo de sorpresa o imprevistos que afecten positiva o negativamente nuestras labores y productividad.
Por otra parte, cabe señalar que la conjunción solilunar contará también con la presencia de Mercurio, aún retrógrado, que desde el signo de Acuario nos invita a abrir este nuevo ciclo con una revisión de nuestras ideas más originales para poder sacarles mayor provecho, así como también con una renovación intelectual, un replanteamiento de nuestra forma de pensar y de comunicarnos, en función de un un nuevo paradigma más acorde con nuestro actual estado de consciencia.
El asteroide Palas también estará en conjunción a estos, potenciando, entre otras cosas, la creatividad propia de este novilunio y aportando a la misma un sentido práctico, favoreciendo enormemente avances en el campo de las artes aplicadas, con la originalidad e inventiva propias del signo de Acuario, y fomentando la comunicación de verdades reveladoras que pueden ser muy esclarecedoras, no sin generar cierto desconcierto.
Estos estarán en cuadratura con Marte en Tauro, añadiendo una violenta e inquietante tensión que tendremos que gestionar con una buena dósis de ejercicio moderado, actividad intelectual y prácticas de respiración consciente, de ser posible, en un entorno natural.
Se encontrarán además precedidos por el resto de planetas que se encuentran formando parte del nutrido stellium acuariano, lo cual hará más vibrante, caótico y rompedor este momento cósmico.
Acuario, signo donde ocurre este novilunio, también está relacionado con los inventos y descubrimientos, por lo que no será de extrañar que durante el desarrollo de esta lunación, tengamos noticia de importantes descubrimientos e inventos revolucionarios, por ejemplo, en el área de la salud.
Y es que, las crisis, también traen sus creces. De los momentos más críticos puede emerger el ingenio humano con soluciones creativas o puede la naturaleza sorprendernos con su inteligencia sanadora, que sólo estaba esperando ser descubierta en algún fruto, hongo, alga, etc.
Hay tanto poder creativo en lo pequeño como lo hay en las lejanas y gigantes estrellas, en todo está la divina chispa de la creación vibrando y evolucionando.
El universo es infinitamente sorprendente. Y cuando aceptamos esa verdad, nos abrimos a la verdadera ciencia, esa que la naturaleza quiere enseñarnos y que la del hombre apenas alcanza a conocer.
Y eso, entre otras cosas, es lo que nos está enseñando Urano en Tauro, dispositor de esta Luna nueva, por su regencia moderna sobre el signo de Acuario.
La Madre natura nos reserva aún muchas sorpresas, por ello, ser humildes y aceptar que es ella la que nos enseña es señal de madurez y sabiduría.
Meditemos pues bajo la premisa de que la vida es cambio.
La tierra está viva y despertando y nosotros con ella, estemos receptivos y abiertos al proceso.
Los temblores, los fuertes vientos y lluvias, son un recordatorio de cuán viva está, nuestra inquietud interior también es un recordatorio de cuán vivos estamos y, si la vida es cambio, es normal que nosotros cambiemos. Mudanzas, rupturas, nuevas amistades y contactos, mayor actividad productiva en redes sociales, sorpresas, renovación, descubrimientos, revelaciones, estarán a la orden del día.
Cambiar para perfeccionar, cambiar para encontrar el orden natural que se había perdido, cambiar para reinventar la manera de funcionar en la vida, cambiar para ser más productivos, más prósperos, para sentirnos más útiles, más íntegros, más verdaderos.
Cambiar, cambiar, cambiar… Y el cambio empieza por dentro… Es allí donde suceden los saltos cuánticos a nivel inconsciente que luego florecerán en nuestra consciencia como ese perfecto orden dentro del caos, propio de los fractales. Y es que eso somos, un pequeño fractal de la totalidad. Cuánta belleza hay en ello, ojalá podamos llegar a percibirlo.
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